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Campamento para niños 2018 de los distritos Sur y Canarias

26.08.2018

La Granja Escuela Parapanda de la población de Alomartes (Granada), fue un lugar maravilloso para el campamento de niños que tuvo lugar del 23 al 26 de agosto.

 
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Niños procedentes de los distritos Sur y Canarias, se reunieron para vivir unos días llenos de actividades y talleres, y como cierre, un Servicio Divino, en el que tanto la palabra como la dinámica del mismo, estaba totalmente orientado a los niños. 


Desde la mañana del viernes 24, comenzaron a realizar diferentes talleres: cuidado de la granja (limpieza y alimentación de los animales), taller de repostería y por la tarde un taller de arcilla. 


El sábado por la mañana los niños hicieron una excursión para visitar una antigua mina, adentrándose en ella con gran intriga y emoción por uno de los antiguos accesos de la misma. Al regresar hicieron un taller de ecología y otro de repostería. También fabricaron un muñeco, al que regándolo y cuidándolo, le crece un pelo verde procedente de semillas.


Para la tarde del sábado se había preparado un taller muy especial. Un experto en cetrería, presentó a los niños diferentes aves: águilas, halcones y otras aves rapaces. El experto les explicó de manera muy apasionada, cómo es la vida de estas aves y lo delicadas que son. Los niños tuvieron también la oportunidad de dejar que alguna de estas aves se posara en sus brazos, los cuales habían sido protegidos por un guante especial. Incluso pudieron ver el vuelo de alguno de estos maravillosos animales. 


Todas las actividades demostraban lo maravillosa que es la naturaleza y el poder de Dios su creador. 


El domingo fue el Anciano de Distrito Víctor Alganza el encargado de oficiar el Servicio Divino. El cual giró en torno a palabra de Lucas 24: 49 “He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto”. 


El Servicio Divino empezó con la historia que está escrita en el libro de los Jueces donde se narra de la historia de Gedeón, el cual venció al enemigo, siendo equipado con las herramientas que Dios le dio y confiando en lo que él le decía. Los enemigos destruían y robaban todo lo que sembraban en el campo para comer. El pueblo pidió la ayuda a Dios en oración. Dios les envió a Gedeón para que les ayudara.” Aunque eran 32.000 los hombres de Gedeón, Dios le dijo “Ve solo con 300 hombres y podrás vencer al enemigo” (eran 135.000 hombres los del ejército enemigo, imposible de vencer con tan solo 300). Durante la noche, Gedeón repartió un cuerno (instrumento musical), vasijas vacías y una antorcha ardiendo para que la metieran dentro de la vasija, y les dijo: “Cuando todos los de mi grupo toquemos el cuerno, vosotros los tocaréis también alrededor del campo del enemigo y gritaréis, y romperéis las vasijas para hacer mucho ruido”. Entonces a la señal, tocaron los cuernos y rompieron las vasijas y levantaron las antorchas para que se vieran en la oscuridad las llamas. Todos los enemigos se asustaron mucho, gritaron y huyeron corriendo. Con tantos miles de soldados corriendo en la oscuridad y pisándose unos a los otros, la mayoría de ellos murieron. Gracias a la confianza de Gedeón y a las herramientas e indicaciones dadas por Dios, de esta manera Gedeón y su pueblo pudieron vencer al enemigo, y el país tuvo tranquilidad y paz durante mucho tiempo. 


Nosotros también hemos recibido este don, dijo el Anciano de Distrito, y podemos hablar en lenguas que a menudo no se hablan en las diferentes situaciones que podemos vivir, por ejemplo: la lengua de la amabilidad, la de la paciencia con los demás aunque se equivocan, la del perdón, etc. Ahora también nosotros podemos levantar nuestra antorcha como Gedeón y sus hombres para vencer muchas situaciones y hablar en otras lenguas no siempre se hablan en nuestro entorno: la lengua de la amabilidad, del perdón, de la paciencia con los demás. 


De manera muy dinámica y activa los niños han participado levantando a menudo sus antorchas, demostrando el poder que Dios nos ha dado, el cual podemos utilizar en muy diversas experiencias en nuestra vida.


Colaboraron con su servir, el Evangelista Germán Martyniuk (Almería) y el Presbítero Eric Cheminade (Fuengirola). 


Todos disfrutaron del almuerzo. Después con la pena visible en los ojos de algunos niños porque el campamento había terminado, vino la despedida y el viaje de regreso.